¿Es rentable fertilizar con polvo de piedras?

Volvemos con otro nuevo capítulo del maestro Julius Hensel sobre la utilización del polvo de piedras para mineralizar nuestros terrenos de cultivo.

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Polvo de piedras por Julius Hensel

Algunas personas dicen: “con algo tan ridículo como la harina de piedras de la que habla Henzel nunca haré nada; nada puede crecer de él, pura basura”, ese es el lamento de las personas que no tienen ningún conocimiento de la química, sin embargo 200 campesinos de Rheinland-pfalz, atestiguaron ante la corte que fertilizar con harina de piedras demostró mejores resultados que aquellos obtenidos hasta ahora con los abonos artificiales.

“¿Qué tiene para decir al respecto?”, le preguntó el juez al joven que había declarado que el polvo de piedra era una estafa (siendo él un comerciante en abonos artificiales). “Yo no digo nada al respecto, las personas que están decepcionando”, contestó el joven, quien fue multado por difamación.

Desde entonces otras personas, que también comercian con abonos artificiales son lo suficientemente nobles para aceptar: ”No negaremos que el polvo de piedras de Hensel  pueda tener un cierto efecto, pero este es demasiado lento y mínimo, ya que las bases de silicatos son casi insolubles y tardan varios años en desintegrarse”. Estas personas también tienen un conocimiento deficiente de la química.

Los silicatos de hecho, son poco solubles en agua y ácido clorhídrico, sin embargo, no resisten la acción del agua y las fuerzas del sol.

Por supuesto al hablar de la solubilidad del ácido silícico no podemos compararlo con la gran solubilidad de la sal común o del azúcar. El calcio no sirve de ejemplo, pues para disolver una parte de él son necesarias 800 partes de agua. El ácido silícico es un poco menos soluble, ya que para disolver un poco más de la mitad de un grano se requieren 1000 gramos de agua. Podemos encontrar ácido silícico disuelto en aguas termales junto con otras sustancias provenientes de rocas primitivas.

Las Personas que afirman que los silicatos de las bases son insolubles, son puestas en contradicción por los árboles de los bosques, así como por cada tallo de paja. Las hojas de los robles en combustión dejan entre un 2 y un 3% de cenizas, y de estas una tercera parte consiste en ácido silícico. ¿Cómo puede llegar hasta las hojas de no ser ascendiendo por la savia que lo transporta en solución?

La acumulación de ácido silícico en las hojas es el resultado de la vaporación del agua que lo ha transportado hasta ellas.

¡Del bosque vamos ahora a la paja!

En las cenizas de las espigas de trigo en invierno, dos tercios consisten en ácido silícico y al quemar la cebada la proporción es aún mayor: está genera aproximadamente 12% de cenizas y 8 y medio de estas consiste en ácido silícico.

Aún más impresionante en la solubilidad del ácido silícico en las ramas y hojas de plantas que crecen en agua o en terrenos húmedos. Los juncos en combustión, por ejemplo, dejan de 1 a 3% de cenizas, más de dos terceras partes de las cuales son ácido silícico.

El Tule o la hierba de los juncos arroja sin por ciento de cenizas de las cuales un tercio es ácido silícico. Que el Tule sea rico en potasio es una prueba contundente de que solo es necesario el riego para que el silicato de potasio opere en el crecimiento de las plantas.

La hierba de cola de caballo deja un 20% de cenizas, de las cuales la mitad consiste en ácido Silícico.

De esto se puede observar que solo en aquellas partes de las plantas que crecen fuera del agua, para que la vaporación pueda tener lugar, es donde se acumula el ácido silícico. Sin embargo, en el agua esta misma solubilidad de ácido silícico varía según su contenido. La mejor prueba de esto la encontramos en las algas marinas. Éstas arrojan una cantidad mayor de cenizas que la mayoría de plantas, a saber, 14%, pero solamente una de 50 de estas es ácido silícico.

Las que quedan, consisten principalmente en sulfato y cloruro de potasio, sodio, calcio y magnesio; a estos, el alga marina los concentra y combina con un tejido celular, ya que el agua de mar no tiene entre un 2 y 3% sino aproximadamente un 4% de constituyentes salinos.

Esto es suficiente para probar que con respecto a la vegetación, el ácido silícico y los silicatos no son insolubles; al contrario ellos entran, con todas las demás combinaciones salinas en la más íntima combinación con ácido glicólico, CH₂OH-COOH qué intramolecularmente se encuentra presente en la celulosa de las plantas – e igualmente con el amoniaco de la clorofila; así pues los silicatos se cuestionan con las plantas que crecen a partir de ellos formando un todo orgánico.

Nosotros podemos convencernos de esto de manera sencilla al sacar del suelo una hierba con todas sus raíces.

Entonces podemos observar que las fibras de las raíces de la mayoría de plantas se encuentran por todas partes entrelazadas alrededor de pequeñas piedras, que columpiándose, se adhieren fuertemente a ellas y solo puede ser zafadas de manera violenta al tirar de alguna de sus fibras.

Así pues, la objeción en cuanto a la insolubilidad del ácido silícico es inválida tanto teórica como prácticamente.

En realidad, no podemos encontrar una raíz, un tallo, una hoja o una fruta que no contenga ácido silícico. Este hecho debe ser conocido por todo profesor de agricultura. ¿Cómo entonces puede negar la solubilidad del ácido silícico en la vegetación, como lo hacen muchos de ellos, quienes defienden el uso de fertilizantes artificiales?

Los hombres interesados en abonos artificiales, quiénes pensaron que habían asistido al funeral del polvo de piedras como fertilizante no han aprendido nada de la historia, o han olvidado como mínimo que cada nueva verdad tiene que ser primero asesinada y enterrada antes de que pueda celebrar su resurrección.

Además, yo no me encuentro tan aislado como aquellas personas suponen, ya que poseo la luz de la verdad y el conocimiento junto a mí.

El hombre solitario tiene fuerza y poder, cuando pelean por la verdad y justicia

También puedo llamar en mi defensa a un completo ejército de hombres, quiénes entienden algo de química y de cultivar basados en verdades científicas, y cuyo número es cada vez mayor hoy en día cuando la ciencia está dando pasos agigantados y cientos de publicaciones bien editadas sobre agricultura están listas para defender los intereses del agricultor.

Lo qué hace falta en el presente es que la manufactura del polvo de rocas sea emprendida por hombres de ciencia, quienes al mismo tiempo tengan una honestidad tan pura como el oro, tanta como para lograr que los agricultores realmente reciban lo que se les ha prometido y lo que ha sido probado como útil hasta entonces.

He recibido innumerables peticiones de los agricultores quienes me han solicitado este abono mineral, sin embargo, he tenido que responderles que con mi edad avanzada no podría incursionar efectivamente en esta industria. Todo el tema es de tanta importancia para el bienestar común, que es mi deseo ver este trabajo puesto en manos realmente confiables. Yo entretanto, seguiré señalando el camino para el beneficio de la humanidad.

El punto práctico para ser tratado es;

¿Qué tanto paga fertilizar como polvo de piedra?

Qué producción va a arrojar y en consecuencia si va a ser rentable para el agricultor hacer uso de él. Por esto, trataré este tema de una manera tan exhaustiva como me sea posible y publicaré los resultados obtenidos.

Debe ponerse como premisa que la finura en la trituración o la molienda y la más completa mezcla de las partes constituyentes, es lo más importante para asegurar el mayor beneficio a fertilizar con polvo de rocas.

Un producto que este tipo llegó recientemente a mis manos, el cual, al pasarlo por un colador de moderada finura, dejaba un recibido áspero, equivalente a las tres cuartas partes del peso total. Pero como la solubilidad del polvo de rocas y por ende su eficiencia se incrementa proporcionalmente a su finura, se requiere el máximo esfuerzo y su molienda.

Entre más fino sea el polvo de roca, con más fuerza puede actuar sobre él la humedad disolvente del suelo y el oxígeno y nitrógeno del aire.

Un grano de polvo de roca de moderada finura puede ser reducido en un mortero de ágata quizás a 20 pequeñas partículas; entonces cada pequeña partícula puede ser puesta al alcance del agua y del aire y puede, en consecuencia, ser usada como alimento para la planta.

De aquí que una sola carga del más fino polvo de rocas hará tanto como 20 cargas de un producto menos fino, de tal forma que, al reducir el polvo de roca a la forma más fina posible, el costo de transporte y el uso de carretillas y caballos, será equivalente a tan solo la veinteava parte. Por eso podemos pagar sin duda un precio más alto por el polvo de piedra más fino que haya sido pasado a través de un tamiz, que por un producto que el lugar de asimilarse a un polvo fino, se asemeje a una arena áspera.

El contenido promedio de cenizas en los cereales es el 3%.

Por esto, a partir de 3 libras de pura ceniza de vegetales, podemos desarrollar 100 libras de cultivo. Ahora, ya que la harina de piedra preparada de una manera correcta contiene una gran abundancia de alimento para la planta en forma asimilable, se podría calcular una producción de 4L/G de cereales, o en una producción anual un uso de 6L/G por aquí podrá producir 24 L/G de grano. Basándose en esto, cada agricultor puede calcular qué tan rentable va a ser este.

Sin embargo, en realidad la cosecha será mucho mayor, porque aún si la harina de piedras, la mayoría de campos contienen algún suministro de nutrientes minerales para las plantas, los cuales harán la fertilidad aún mayor.

No toda la arena de piedras es consumida por completo en el primer año, pues esta les suministra nutrientes a las plantas aún en el quinto año, así como ha sido demostrado en experimentos.

Es un hecho que no se estaría cometiendo ningún error al doblar la cantidad sobre un acre o sea 12L/G  el lugar de 6; la posibilidad de una producción aún mayor se verá con esto mejorada y al aplicar 12 L/G se estará suministrando en abundancia, es más, aún cinco o seis veces la cantidad, todavía estaríamos lejos de causar un mal a la tierra, pues no podemos forzar por medio de cantidades excesivas de polvo de piedras, a que la producción correspondiente del cultivo sea mayor, por la sencilla razón que dentro de un área definida, solo una cantidad definida de luz solar puede ejercer su actividad, y es sobre este factor que depende principalmente el crecimiento del cultivo, por eso no tiene ninguna ventaja en sobrepasar la cantidad de abono mineral coma ya que esté solo entraría en uso en los siguientes años y además es más práctico si se suministra la cantidad requerida cada año.

Ahora presentaré en forma resumida la esencia el significado de este fertilizante natural:

  1. Se trata no solo de conseguir mayor cantidad de producción sino mejor calidad. La remolacha azucarera incrementa de este modo su cantidad de azúcar; está, de acuerdo con experimentos realizados, es 75% mayor que hasta entonces. Las papas y los cereales demuestran una proporción mayor de almidón. Las plantas oleaginosas (amapola, nabo, etcétera.)  muestran un mayor desarrollo en el pericarpio de sus semillas y en consecuencia un aumento en el aceite. Legumbres tales como habichuelas, arvejas, etc., producen más lecitina (aceite que contiene fosfato de amonio, qué es el fundamento químico de las sustancias nerviosas) las frutas y todos los vegetales desarrolla un sabor más delicado. (Los vegetales de mi huerta se han vuelto famosos entre nuestros vecinos y nuestros visitantes, que las preguntan al respecto: “¿cómo lo consigues?”) Las Praderas desarrollan pastos y paja de mayor valor nutritivo. Las plantas de vid, con brotes y tallos más fuertes, dan uvas más fuertes y más dulces y no son tocadas por enfermedades producidas por hongos e insectos.
  2. El suelo es reconstruido y mejorado en forma constante por este fertilizante natural, ya que se normaliza progresivamente, es decir, muestran conjunto al potasio, sodio, calcio, magnesio y ácido fosfórico y sulfúrico, ect., reunidos en la combinación más favorable. Difícilmente existe un campo cultivado, cuya naturaleza sea normal hoy en día; ya sea que prevalezca el calcio o que tengamos un suelo arcilloso, que debido a su exceso de arcilla impide el ingreso de agua de lluvia y pureza obstruye el acceso del nitrógeno atmosférico y del ácido carbónico (gas carbónico en agua) o ya sea un suelo predominantemente arenoso (cuarzo) o quizás uno que tenga un exceso de humos como el suelo de los terrenos pantanosos. Este último es caracterizado por un predominio de calcio y de magnesio, por un lado, mientras las bases sulfúricas se encuentran dos a tres veces en mayor cantidad en relación con las bases fosfóricas, así como lo demuestra un análisis de las cenizas de la turba.
  3. El valor del nuevo fertilizante con respecto al valor nutritivo de las plantas y del forraje, depende en gran parte del cuidado y la finura de la mezcla de sus muchos constituyentes, de tal forma que, con muy poco polvo de potasio y sodio, los otros elementos nutritivos requeridos para cooperar en la construcción armónica de las plantas se encuentren a su alcance en una íntima cercanía. En contraste con esto en una fertilización parcial con calcio, puede ocurrir que la planta se contenta con el calcio de tal forma que los otros elementos del suelo no son absorbidos para cooperar con el crecimiento de la planta, debido a que no se encuentran próximo a las fibras de las raíces. Esto, por supuesto, es de gran importancia para la calidad y el valor nutricional de las plantas.

Para que el cultivo de plantas nutritivas y forraje puedan aportar una alimentación completa (equilibrada), considero que es de la mayor importancia, que no sean usadas sustancias que conlleven una descomposición amoniacal.

Por medio de tales adictivos, de hecho, podemos conseguir un crecimiento exuberante y excesivo que impacta nuestra vista y en el cual la abundante formación de hojas por medio del nitrógeno constituye la parte principal; sin embargo, con esto no se consigue ningún crecimiento sano. A partir de este punto de vista tampoco soy partidario del uso del así llamado “guano de pescado”.

Todos conocemos la velocidad con la que el pescado pasa un estado de putrefacción: se forma al mismo tiempo una considerable cantidad de propilamina C₃H6NH₃, la cual es una base amoniacal amoniacal. El abono manufacturado en Suecia a partir de guano de pescado y feldespato pulverizado, no merece por consiguiente la estima que pretende.

Permacultura es un sistema de principios de diseño agrícola y social, político y económico basado en los patrones y las características del ecosistema natural.

Este reportaje nos muestra varios ejemplos de los métodos permaculturales.

Fuente: Asociación ambientalista guerreros verdes A.C.

Titulo original: Panes de piedra. Por Julius Hensel

Investigación y traducción:

  • Fundación Juquira Candirú
  • Hans Landgraf
  • Jairo Restrepo Rivera
  • Sebastiao Pinheiro

¿Es rentable fertilizar con Polvo de piedra? – PDF

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