Plagas que afectan a las plantas y soluciones. [MEGA GUÍA]

Las plagas que afectan a las plantas son muy comunes sobre todo en monocultivos. Las plantas se ven obligadas a compartir su hábitat con una gran variedad de organismos tanto beneficiosos como hostiles, entre los que se encuentran animales, insectos, bacterias y virus, formando un complejo entretejido de relaciones que permiten el desarrollo de todos ellos. Normalmente las especies vegetales propagadas son alejadas de su equilibrio natural para crecer en monocultivos donde son extraordinariamente vulnerables al ataque de plagas y enfermedades.

Las plantas propagadas son alejadas de su equilibrio natural para crecer en monocultivos donde son extraordinariamente vulnerables al ataque de plagas y enfermedades. Clic para tuitear

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La utilización de calor de fondo, el riego frecuente y la presencia de una humedad elevada, tan esenciales para la propagación, también favorecen la proliferación de diversos hongos debilitadores.

A menudo éstos se introducen cuando se observa una higiene poco estricta al preparar el material vegetal o a través de substratos contaminados, y entre ellos se encuentran diversas especies de Phytophthora, Pythium y Rhizoctonia, que pueden causar la caída y la aparición de moho en las plántulas.

Con el fin de intentar prevenir estos problemas o, si no se han podido evitar, de reconocerlos y tratarlos en las primeras fases, a continuación, se describen algunas de las principales enfermedades, plagas y desórdenes que afectan a las plantas.

Principales problemas de plagas que afectan a las plantas y soluciones.

A continuación desglosamos los tipos de enfermedades más comunes que afectan a las plantas. Problemas, causas y posibles soluciones orgánicas para el control de plagas.

• Virosis.

Problema. Las hojas y tallos ven alterado su desarrollo y generalmente presentan franjas o manchas amarillas.

Causa. Muchos virus con frecuencia se transmiten a través de los progenitores infectados o de insectos chupadores de savia, como los áfidos. También puede deberse a una deficiencia de Calcio.

Solución. Destruya rápidamente la planta afectada y lávese las manos y las herramientas cuidadosamente después de la manipulación. Realice un tratamiento rico en Calcio al terreno de cultivo.

• Áfidos.

Problemas. Estos insectos chupadores de savia ocasionan un desarrollo alterado y el distorsionamiento de las hojas.

Causa. Los áfidos segregan una ligamaza azucarada sobre la cual crece la negrilla, en especial cuando la humedad es alta. Este problema es debido también a la falta de Calcio y Potasio.

Solución. Rociar la plaga con un insecticida orgánico como; Caldo Bordelés, caldo sulfocálcico y jabón potásico prieto o negro.

• Chamuscado de raíces.

Problema. Al formarse la raíz, la base del esqueje oscurece y se atrofia, y, posteriormente, las partes superiores se decolarán y mueren.

Causa. Está causada por un hongo del suelo o del agua que se introduce a través de recipientes o herramientas sucias, sustrato contaminado o agua contaminada.

Solución. Mantener siempre una higiene estricta y utilice para enraizar un compuesto fungicida y agua. Podemos hacer un tratamiento con microorganismos de montaña en el terreno para descontaminar posibles infecciones en el agua.

• Caída de almágica.

Problema. Las plántulas penden flojamente, con frecuencia con un anillo marrón en la base del tallo, y aparece un hongo blanco.

Causa. Los hongos del agua y del suelo se extienden rápidamente en sustrato húmedo, con calor húmedo, luz pobre y siembra poco espaciada.

Solución. Cuando siembre, observe una buena higiene y utilice un fungicida que contenga cobre y amonio.

• Heladas.

Problema. Las partes superiores de las hojas de los esquejes o plántulas adquieren una tonalidad marrón o negra, o revisten un color verde pálido o marrón como si estuvieran quemadas y pueden marchitarse, debilitarse o morir.

Causa. Heladas y cambios de temperaturas brucos.

Solución. Despunte las hojas afectadas o elimine las plantas que se encuentren dañadas. Para evitar heladas, utilice plásticos e invernaderos. Y si el frío es intenso utilice un propagador con calefacción o quemadores de parafina.

• Daño causado por ratones.

Causa. Las semillas, especialmente de guisante, judías y maíz, así como los cormos de Crocus plantados en el exterior constituyen el blanco perfecto para estos animales, que dejan los vástagos tirados por el suelo.

Solución. Afirme la tierra sobre los cormos para evitar que los ratones los descubran, y cubra los semilleros, una vez los haya plantado de nuevo, con una malla fina de alambre, o siembre en el interior.

• Falso MILDIU.

Problema. Áreas amarillas o descoloridas en el haz de las hojas, que corresponden a un desarrollo fúngico velloso, blanco grisáceo o púrpura, común entre los ejemplares jóvenes. La infección se puede extender y matar las plántulas o afectar seriamente su desarrollo.

Causa. Varios hongos diferentes, en particular especies de Peronospora, Bremia y Plasmopora, que se ven favorecidos por la humedad. Deficiencia de Boro en el terreno.

Solución. Elimine las hojas infectadas tan pronto observe la enfermedad. Mejore la circulación del aire alrededor de las plantas separándolas y controlando las malas hierbas. En invernadero, aumente la ventilación, y evite el riego superficial, así como amontonar macetas o bandejas. Rocíe las plantas infectadas con un fungicida adecuado.

• Nematodos o anguílulas.

Problema. Estas plagas, que se alimentan de la savia, dejan agujeros no visibles en las hojas, pero liberan una saliva tóxica que provoca su deformación y decoloración. Los nematodos que habitan en el suelo pueden matar las raíces y extender enfermedades víricas.

Causa. Animales microscópicos de aspecto vermiforme que se alimentan en las plantas huésped, como en el caso del nematodo o la anguílula del narciso, o bien viven en el suelo y atacan los pelos de raíz (Pratylenchus, Longidorus, Trichodorus, Xiphinema), Las principales plagas de estos animales que atacan plantas de invernaderos en flor son los nematodos de las hojas (Aphelenchoides).

Solución. No existe un control eficaz para los nematodos. No vuelva a plantar ejemplares de la misma especie en las zonas de donde se hayan extraído plantas infectadas. Una higiene estricta es esencial; queme todas las plantas y hojas afectadas.

En algunos casos se han probado tratamientos con fosfitos y rotación de cultivos con excelentes resultados.

• Etiolado.

Problema. La planta adquiere un aspecto pálido, con un desarrollo foliar pobre y nudos ampliamente espaciados.

Causa. Una fuente de luz inadecuada, lo que provoca un alargamiento en busca de la luz y un desarrollo anormal de la clorofila.

Solución. Traslade las plantas a un lugar aireado y con sol. Proporcione luz adecuada para las plántulas nuevamente germinadas.

• Podredumbre de pie y de raíz.

Problema. Deterioro de tejidos junto a la base del tallo, que provoca que las partes superiores de la planta se marchiten, se decoloren y mueran. Las raíces pueden adquirir un color negro y romperse o pudrirse.

Causa. Un gran número de hongos del suelo y el agua que se desarrollan donde las condiciones no son del todo higiénicas. Tomates, pepinos y melones se ven a veces afectados, en especial en invernaderos. Si no se remedia, el hongo se instalará en el suelo. El escaso de riego es uno de los principales problemas.

Solución. No existe ningún remedio disponible. Para evitar la diseminación de los hongos, queme rápidamente las plantas junto con la tierra o el sustrato que se encuentra alrededor de las raíces. Una buena higiene previene la introducción y propagación de la enfermedad. Replante con plantas resistentes.

• Moho gris (BOTRYTIS).

Problema. Hongos grises, ocasionalmente de color blanquecino o marrón grisáceo y vellosos en las áreas infectadas, que pueden atacar a todo cuanto se encuentre por encima del nivel del suelo. Normalmente penetra a través de heridas.

Causa. Un hongo común, Botrytis cinérea, crece cuando la humedad es elevada. Las esporas se encuentran casi siempre presentes en el aire y se diseminan con la lluvia o las salpicaduras de agua y las corrientes de aire. Las esporas pueden persistir año tras año como esclerocia (esporas durmientes) en el suelo o en los tejidos de las plantas infectadas. Deficiendia en Boro origina el brote de Botrytis.

Solución. Elimine las partes de la planta dañadas o muertas antes de la infección, dejando la parte que se desarrolla sana. No deje restos alrededor. Rocíe con un fungicida adecuado. Mejore la circulación del aire y reduzca la humedad.

• Oídio.

Problema. Manchas blancas, de aspecto polvoriento, causadas por hongos en el haz de las hojas, y posteriormente en el resto de la planta. La parte afectada, especialmente el follaje joven, puede amarillearse y distorsionarse. El desarrollo puede verse empobrecido y, en casos extremos, morir.

Causa. Diversos hongos, en particular muchas especies de Oidium, Microsphaera, Podosphaera, Uncinula, Erysiphe y Phyllactinea, que se desarrollan sobre plantas en suelos secos. Algunas infectan únicamente un solo género o plantas huéspedes muy relacionadas; en otras, el ataque es más generalizado. Las esporas se diseminan por el aire y la lluvia, y el hongo puede pasar el invierno en la superficie de la planta.

Solución. Evite lugares secos, y abone si es necesario. Mantenga las plantas adecuadamente regadas, pero evitando el encharcamiento. Elimine las hojas infectadas inmediatamente. Rocíe con un fungicida adecuado o haga un tratamiento con azufre.

• Araña roja.

Problema. Las hojas desarrollan un fino moteado pálido en la parte superior; el follaje adquiere una coloración grisácea, y posteriormente amarillenta. Las hojas caen prematuramente y una fina telaraña plateada puede cubrir la planta.

Causa. Ácaros chupadores de savia, Tetranychus urticae, que atacan un amplio abanico de plantas de interior y de invernadero, así como de exterior en áreas secas y cálidas. Los ácaros tienen menos de 1 mm de longitud y cuatro pares de patas. Crecen rápidamente en condiciones cálidas y secas; algunos presentan una gran resistencia a los pesticidas.

Solución. Mantenga una humedad alta. Bajo cubierto, introduzca el ácaro depredador Phytoseiulus persimilis antes de que la infección sea demasiado seria. Las plantas pueden rociarse con azufre (Caldo sulfocálcico) o jabón insecticida.

• Royas.

Problema. Grupos de esporas, bien sea en grupo o como pústulas, normalmente de un naranja brillante o marrón oscuro, en la parte inferior de la hoja, con una decoloración amarilla sobre ellas.

Causa. Diversos hongos, en especial Puccinia y Melampsora, que se desarrollan en condiciones húmedas. Las esporas son diseminadas por las gotas de lluvia y las corrientes de aire. Deficiencia de Cobre.

Solución. Elimine las hojas infectadas, mejore la circulación del aire y controle el desarrollo inadecuado. Rocíe las plantas con un fungicida (Caldo Bordelés).

• Moscas o mosquitos de los hongos.

Problema. Moscas de un marrón grisáceo, de 3-4 mm de longitud, que vuelan o corren sobre el sustrato. Las plántulas y esquejes verán afectado su desarrollo. Pueden observarse larvas blancas translúcidas.

Causa. Larvas de mosca (como Bradysia) de cabeza negra, 5 mm de longitud, que se alimentan principalmente de materia orgánica descompuesta, pero también de las raíces de plántulas y esquejes, y nacen en las bases de los tallos de los esquejes.

Solución. Mantenga una buena higiene y evite regar en exceso. Introduzca un ácaro depredador (Hypoaspis miles) o un nematodo (Heterorhabditis) que se alimente de las larvas. Empape el sustrato con caldo mineral a base de bicarbonato de sodio.

• Chamuscado.

Problema. Las hojas se marchitan, adquieren un color amarillo o marrón, se secan y doblan, y pueden morir; primero se ven afectados los márgenes. Los tallos pueden sufrir necrosis.

Causa. Temperaturas excesivamente altas, especialmente en un invernadero, luz del sol brillante, pero no necesariamente muy fuerte, o viento que seca las hojas. Carencia de Calcio.

Solución. Intente prevenir la aparición de la enfermedad mejorando la ventilación, proporcionando sombra y protección a las plantas y humedeciendo el suelo del invernadero.

• Caracoles y babosas.

Problema. Aparecen agujeros irregulares en el follaje de las plántulas y esquejes, y los tallos se ven dañados a nivel del suelo. El mucíelago viscoso puede dejar un perceptible depósito plateado.

Causa. Babosas (como Milax, Arion y Deroceras) y caracoles (como Helix aspersa); se trata de moluscos de cuerpo delgado que se alimentan del material tierno de la planta, principalmente de noche o después de la lluvia.

Solución. Un depredador efectivo son los patos; elimine las que pueda manualmente en días lluviosos después de que oscurezca; utilice barreras echas con ceniza. Proteja las plantas más vulnerables, en especial cuando el tiempo sea húmedo.

• Trips.

Problema. Una fina decoloración de un blanco plateado con diminutos puntos negros aparece en el haz de las hojas.

Causa. Muchas especies distintas de trips o moscas de tormenta, unos insectos de cuerpo estrecho, alargado, de un color negro pardusco y 2 mm de longitud, en ocasiones con bandas de color pálido, que succionan la savia. Se desarrollan cuando hace calor y la humedad es baja.

Solución. Riegue regularmente las plantas, mejore la circulación del aire y disminuya la temperatura. Rocíe con aceite de neem, diatomeas o jabón prieto o negro cuando note los primeros síntomas.

• Larvas de gorgojo de la vid.

Problema. El desarrollo de la planta se hace más lento, hasta que se marchita y muere. Estos animales pueden roer los tejidos más externos de plántulas de especies leñosas y esquejes desde la parte inferior de los tallos.

Causa. Larvas gruesas sin patas, de color blanco cremoso, del escarabajo Otiorhynchus sulcatus. Miden hasta 1 cm de longitud, con cabezas parduscas y cuerpos ligeramente curvados, viven en el suelo y se alimentan de raíces. Las plantas que se desarrollan en macetas, como esquejes y plántulas de especies leñosas, son las más propensas a verse afectadas.

Solución. Una buena higiene evita tener que proteger los ejemplares adultos. Utilice un nematodo patógeno (Heterorhabditis o Steinernema) en la tierra o sustrato a finales de verano antes de que las larvas sean demasiado grandes.

• Gusanos de alambre.

Problema. Los tallos de las plántulas se ven afectados justo por debajo del nivel del suelo.

Causa. Larvas de un marrrón anaranjado, alargadas, de diversos escarabajos de resorte (como la especie Agriotes) de 2,5cm de longitud, que habitan en el suelo. Son más numerosas en la tierra recién excavada, pero desaparecerán de forma gradual si la tierra se cultiva regularmente.

Solución. Proteja las plántulas pulverizando las hileras bacillus thuringiensis. Cultive regularmente y elimine las malas hierbas del suelo.

Conclusiones.

Como hemos visto en el trascurso de este artículo, los problemas que pueden tener nuestros cultivos son muy variados. Desde EstoEsAgricultura recomendamos siempre un buen sustrato orgánico y rotación de cultivos para la mejora y defensa contra estos ataques.

Si por el contrario ya tenemos instalada un plaga, recomendamos insecticidas orgánicos, bio-fumigación con microorganismos y aplicación de bioles específicos. Tambien, se puede usar caldos minerales para la rehabilitación y control de deficiencias.

A continuación vamos a ver algunas tablas de deficiencias de minerales que nos podemos encontrar en nuestras plantas.

La aplicación de potasio y silicio aumenta la resistencia de los cultivos al ataque de plagas y enfermedades.

Fuente: Ana María Primavesi, Curso de agricultura de sol y malezas, IICA, 2002 Bogotá, Colombia, adaptación: Jairo Restrepo Rivera. 2003.

Relación entre plagas, enfermedades y deficiencias

Ninguna planta puede ser parasitada si no ofrece al parásito el substrato que él necesita.

Fuente: Ana María Primavesi. Curso de agricultura de sol y malezas, IICA, 2002 Bogotá, Colombia. Adaptación : Jairo Restrepo Rivera. 2003.

Enfermedades provocadas por exceso de nitrógeno

Fuente: Ana María Primavesi, Curso de agricultura de sol y malezas, IICA, 2002 Bogotá, Colombia. Adaptación: Jairo Restrepo

Con los cultivos transgénicos dicen evitar las malezas y las plagas, pero no corrigen los problemas de los disturbios minerales que las provocan, los cuales son cada vez mayores

Fuente: Ana María Primavesi. Curso de agricultura de sol y malezas, IICA, 2002 Bogotá, Colombia, Adaptación: Jairo Restrepo Rivera. 2003.

Poco a poco vamos introduciendo la manera de hacernos nuestros propios insecticidas orgánicos, fertilizantes orgánicos y caldos minerales para uso en agricultura.

Con el buscador del portal podrán encontrar muchas de las formulaciones que hemos recopilado de los mejores instructores de agricultura orgánica.

Probados en multitud de fincas a lo largo de todo el mundo.

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